sábado, mayo 28, 2005

FELT MOUNTAIN - Goldfrapp °°



Antes de comenzar debo declarar, en defensa de este disco, qe fue editado en el 2000 y qe no es su culpa qe a mi me haya llegado hasta el 2005. Pop, orqestas de cabaret, películas de los setenta y martinis son cosas qe me vienen a la mente con este álbum.

La voz cachonda de Allison susurra y coqetea sobre los arreglos jamesbondescos del multiinstrumentalista Will Gregory. Si los de Portishead estuvieran enamorados sonarían a Goldfrapp. Al darle play a Felt Mountain, una oleada de recuerdos qe no sabías qe existían se despiertan y te llegan al conciente emocionándote y acelerándote. Lo malo es qe para la tercera canción la situación ya no es ni sopresiva ni emocionante, sino cotidiana y hasta aburrida.

Insisto, tal vez si lo hubiera escuchado en su momento hubiera logrado asombrarme y perplejizarme. Pero hoy no.

DANNY THE DOG - Massive Attack °°°°°



Robert del Naja se pone nuevamente su disfraz de Massive Attack para aventarse la banda sonora de una nueva película escrita por Luc Besson. El título original de la película es Danny The Dog, aunqe llegó como Unleashed a los Estados Unidos y probablmente en México la conozcamos como Un Pícaro Can Suelto en la Mafia o algo así.

Siempre es extraño escuchar un soundtrack sin haber visto la película. No se supone qe sea música nada más, sino un elemento más de un sistema mayor. El efecto en Danny The Dog se incrementa con el hecho de qe pocos de los veinte tracks duran más de dos minutos y medio. Es como esos bocadillos qe dan en los vinos de honor: pruebas un poco de todo y todo es delicioso, pero en realidad no terminas de satisfacer tu antojo por uno de ellos. Pero la sensación qe te deja no es de instatisfacción y menos de hambre, sino una enfermiza obsesión por conseguir más panesitos con qeso Philadelphia, con jamón serrano y aceitunas o con paté de ostión.

Danny The Dog es un bonito album instrumental en el qe pueden identificarse dos vertientes de canciones: por un lado, las qe evidencian un leve retorno a lo más trance de Massive Attack; y por el otro, una nueva faceta plagada de cuerdas, pianos y arreglos sinfónicos hasta ahora no mostrada por el proyecto de Bristol. Estoy seguro qe, una vez vista la película, qedará como uno de esos soundtracks qe logran evocar las sensaciones de la película a qe pertecen, tal como los discos para Fight Club de los Dust Brothers y Run Lola Run de Tom Tykwer.

jueves, mayo 26, 2005

HAPPINESS - Fridge °°°°



Lo más extraño de este disco no son los nombres de las canciones, sino el hecho de qe el vocalista de la banda tiene su propio proyecto solista -Four Tet- en el cual según esto daría rienda suelta a su lado electrónicoambientallentodeprimente para conservar a Frdige en el rock indie. Pues su último trabajo con la banda, Happiness, es mucho más experimental y antirockero qe sus ruiditos fourtetianos.

"Cut Piano and Xilophone", "Tone Guitar and Drum Noise" y "Sample and Clicks" son algunos de los temas qe se incluyen en Happinnes. El asuntito no es para nada denso ni elaborado, pero definitivamente está muy lejos de considerarse digerible. Digamos qe es como música para bebés tocada con saña. Yo le pondría una advertencia de "solo para usuarios avanzados" en el empaqe.

Durante toda la hora qe dura el disco no escucharás una sola voz... bueno, hay samples de un coro de niños en "Five Four Child Voice", pero no cuenta. Es más, a duras penas lograrás identificar al grupo de rock Fridge interpretando sus tradicionales baterías, bajos y guitarras. Pero ahí están, entregando música perfecta para los qe somos entusiastas del género. Y es precisamente su elitismo lo qe no me permite calificar de "súper padre" a uno de los discos más interesantes qe he oído últimamente.

miércoles, mayo 25, 2005

WITH TEETH - Nine Inch Nails °°°°



Hay grupos qe se supone deben gustarte. En este momento se me ocurre Pearl Jam. La gente se sorprende cuando les digo qe en realidad no tengo ningún disco de ellos y qe ni me llaman la atención. Algo parecido pasa con Nine Inch Nails, de qienes no había escuchado nada más qe dos o tres sencillos. Pero al fin cedí y, alentado por Da'Bit, me hice del nuevo disco de esta banda qe sirve de fachada para el monito Trent Reznor.

Fue hasta la segunda escuchada qe comenzó a gustarme. Para ello tuve qe suponer qe la voz no estaba ahí y concentrarme en oir la música nada más. Qe bonita. Me recordó mucho al Massive Attack maloso de hace 10 años, pero con algunos toqes dulzones tipo Four Tet. Beats agresivos qe evitan caer en los clichés de The Prodigy, bajeos duros, guitarras disfrazadas de sintetizadores y omniprescentes pianos. Muy bien logrado el efecto rock con herramientas más típicas de la electrónica.

Pero bueno, por mucho qe lo qiera negar las canciones también tienen voz. Cuando Trent gruñe y se enoja me la creo. Pero todos esos arreglos vocales más melódicos -inclusive intentos de falsete- se oyen hipócritas. Se percibe una especie de obligación a hacerlos. Imagínate a Trent Reznor diciendo "ahora si voy a meter arreglitos de voz melódicos para qe vean qe también sé cantar bonito". Lo siento mucho, señor del nombre padre, pero no te salieron.

Nine Inch Nails no tiene porqe preocuparse en hacer buenos discos: tiene ese efecto dogmático sobre sus seguidores que lo exime de tal presión. Si eres seguidor de este grupo probablemente ya estés poniéndome adjetivos tipo "blasfemo" o "ignorante". Se vale. Si no estás en la onda NIN, este puede ser un buen álbum para empezar, ya qe el pasado es doble y podría ser mucho para los legos y el anterior a ese... bueno... es de hace muuuuuuucho.