martes, noviembre 29, 2005

THE COOKBOOK - Missy Elliot °


2005


Al igual qe el country y el ska, el hip hop -y especialmente el norteamericano- me parecía un género muy limitado por sus reglas, las cuales dejan poco espacio para variaciones e innovaciones, amén de dejar de ser hip hop -o country o ska. Tal vez era yo un intolerante, de esos qe se filtran en un género y mandan a todos los demás a la hoguera porqe "todas las canciones suenan igual y no tiene chiste". Sin embargo, vía MTV me receté un par de sencillos de Missy Elliot aderezados con sendos videazos bien chévere y lo encontré interesante. No era igual al resto. Tenía esas disonancias harmónicas qe tanto disfruto en la música y los fraseos del rap no eran tan predecibles. Pensé qe tal vez mis estereotipos me estaban manteniendo alejado de algo qe estaba padre. Abrí mi mente y me hice de The Cookbook, el nuevo álbum de Missy Elliot.

Bah. Pues creo qe tenía razón. A excepción de los dos singles qe había oído y algún otro momentito por ahí, este disco era todo lo negativo qe había pensado qe sería. Mil voces empalmadas, letras sobre la supremacía del rapeando y su grupo de amigos, sampleos casi aleatorios y obsesivamente repetitivos y trece invitados en cada canción. Al hip hop le urge un redentor, o dentro de diez años seguirá sonando igual qe hoy, así como hoy suena igual qe hace diez años. Sólo han cambiado los autos: en los noventas eran como Corvettes, ahora andan en Hummers.

martes, noviembre 22, 2005

TENDER BUTTONS - Broadcast °°°°


2005


Dicen qe el sonido melancólico, frío y enfermizo de Bristol no se puede lograr con guitarras, bajos y baterías. Broadcast dice qe si. Dicen qe una canción qe sólo repite y repite el mismo sonido es aburrida y monótona. Broadcast dice qe colando sonidos de videojuegos a las grabaciones, suenan tan interesantes como cualqier variedad de notas. Dicen qe las melodías vocales siempre deben predominar en cualqier canción. Broadcast dice qe la voz es un instrumento más y qe, como tal, a veces predomina y a veces no. Dicen qe el low-fi está out. Broadcast dice qe el low-fi puede estar tan in como Miranda. Dicen qe Broadcast suena como los Yeah Yeah Yeahs. Broadcast dice qe ellos se formaron primero y qe además les vale madre porqe al fin y al cabo ellos si son europeos.

Dicen qe el pop es soso. Broadcast se da la vuelta y se aleja apretando los labios para no dejar escapar una carcajada.

jueves, noviembre 17, 2005

LOTOFIRE - Ely Guerra °°°°

2002



No sé si se valga incluir este disco en Muchos Discos. Ya lo tenía. Lo compré hace mucho y después de hipnotizarme oyéndolo y viendo las fotos qe venían de Ely en ropa interior lo presté y –como todo lo bonito qe prestas- lo perdí. Hoy volvió en forma de archivo. Solo será cosa de convertirlo en disco y volver a rellenar la cajita vacía qe aún conservo al fondo de mis torres de discos, en mi supuesta categoría de “perdidos”, junto a los empaqes huecos del Live At Roseland de Portishead y Vespertine de Björk.

Ely se convirtió en celebridad por su dueto con La Ley y luego con su Sweet & Sour, Hot and Spicy. Pero antes tuvo este Lotofire. Su disco anti-rock. Su disco susurrado y triphopero; igual de sexual qe el nuevo predilecto, pero en una sexualidad menos salvaje, sin gritos y sin cera caliente, sexualidad de cartitas de amor y aún vistiendo el bra debajo de las sábanas.

Sumisita, sumisita, Ely respira mucho sobre el micrófono, lastimada de pasión y reponiéndose a pasitos. La electrónica es prominente, compartiendo las bocinas con guitarras acústicas. Qe bonito suena esa combinación, ¿no? Evita los redobles, distorsiones y aceleraciones aparatosas para prenderte y levantarte de tu sillón de la emoción. Lotofire te convence de las palabras qe repite y repite y te prende hundiéndote más entre los cojines y haciéndote apretar la boca.

AUDIO - Blue Man Group °°

1999



El empaqe de Audio presume qe la música de este álbum no padece de las interrupciones y mangoneamientos de qe es víctima en los shows en vivo de estos monos azules y pegajosos. Pues qe lástima. Música descontextualizada. Pero aún y cuando el audio de los postmimos de Blue Man Group pierde mucho escuchado fuera de su hábitat natural, sigue siendo excitante.

Cuantas percusiones. Cuantos instrumentos inventados. Cuanto PVC. El frenesí del disco no cesa. Te escala y te escala y luego te deja caer para volverte a escalar. En realidad este rock no me ubica en alguna época o estilo, sino en momentos. Supongo qe tiene qe ver con qe ya los vi en vivo.

Es bueno qe no suene a música de comedia. De ser escuchado por alguien ajeno a la comedia física de los Blue Man Group igual y ni te creía de donde viene ese sonido tan serio, estructurado y dramático. Y menos qe lo grabaron en 1999.